• 02 ENE 18
    • 0
    Como recuperarse después de un atracón de comida

    Como recuperarse después de un atracón de comida

    El invierno es una época muy difícil para llevar una vida sana, no solo por el hecho de los atracones propios de la Navidades, sino por que debido al mal tiempo da pereza salir de casa a correr, levantarse antes de la cama e incluso resulta complicado pagar el gimnasio porque es un dinero que necesitamos para invertir en regalos y autoregalos.  Como sabemos que es difícil seguir una alimentación equilibrada en estas fechas, vamos a darte unas pequeñas pautas a  seguir para que el complejo de culpa no sea tan grande.

    Hidratarse y mineralizarse

    La primera máxima tras un empacho o una gran ingesta de alcohol es la hidratación, ya que el cuerpo necesita desintoxicarse. Es importante tener en cuenta que el alcohol, que en estas fechas está presente en todas las mesas, engorda y da hambre, lo que provoca que la ingesta de alimentos no recomendados es superior. Para hidratarte no hace falta que bebas y bebas y vuelvas a beber, como los peces en el río: puedes incluir el agua en comidas nutritivas y adecuadas para la reparación postatracón, como una sopa de verduras, un puré claro o un caldo con poca grasa. Recuerda que la fruta también hace el mismo efecto. El uno de enero aprovecha las uvas sobrantes (sin pasarte) o toma piña (no en almíbar, claro), kiwis, cerezas o naranjas. Agua y alimento a la vez de la mejor forma posible.

    Dormir

    No hibernes como un oso, pero tampoco duermas cuatro horas o sentirás necesidad de comer a deshoras para mantenerte en pie. El cansancio es uno de los principales motivos por los que sentimos hambre cuando, por las calorías que hemos comido, no deberíamos.

    Cuando no respetamos los ciclos normales de sueño, es decir, permanecer toda la noche despierto y dormir poco con el sol en todo lo alto, las hormonas que regulan el apetito se descontrolan: disminuye la leptina (directamente relacionada con la sensación de saciedad) y aumenta la grelina, que estimula las ganas de comer. Para colmo, este círculo vicioso favorece los antojos de azúcar. De nuevo, te recomendamos que en esos momentos te acuerdes de la fruta en lugar de en los zumos embotellados o las bebidas energéticas, fáciles de consumir pero no tan saludables.

    Desayunar bien y variado

    Es posible que tras haberte saciado el día anterior, no quieras desayunar o solo tomes un té, para contrarrestar, pero no es así, debes comer al día siguiente de forma moderada.

    Los mejores desayunos incluyen proteína (y hay proteína más allá del embutido: toma frutos secos sin sal y crudos, por ejemplo, o un puñadito de legumbres cocidas), fruta y no tienen carbohidratos refinados, como la bollería industrial que, además de engordar, provoca un pico de azúcar que en unas horas desembocará en un nuevo capricho de dulces. Si tienes hambre, puedes añadir grasas vegetales como un chorrito de aceite de oliva o un trozo de aguacate.

    Aunque los lácteos son recomendables en general en el desayuno, ten cuidado con ellos (sobre todo quesos y cremas de queso, nata o helados) si tienes gases tras un atracón: pueden empeorar el problema. Además, muchas personas son intolerantes a la lactosa y no lo saben. Si observas relación, consulta con el médico.

    Como norma general, los probióticos van bien en estos momentos porque ayudan a regular el tránsito intestinal. Si eres de café con leche entera de todos los días, es mejor que tras un banquete lo sustituyas por algún producto bio.

    Deja un comentario →

Deja un comentario

Cancelar

    ¿Te llamamos?

    Por favor rellena los siguientes datos y te llamaremos: