Entumecimiento repentino: señales de alerta
El entumecimiento es una sensación extraña, a menudo descrita como «hormigueo», “adormecimiento” o pérdida de sensibilidad en alguna parte del cuerpo. Aunque en muchas ocasiones puede deberse a una causa leve, como mantener una mala postura durante un periodo prolongado, hay situaciones en las que un entumecimiento repentino o persistente puede ser un síntoma de un problema serio en la columna vertebral o en el sistema nervioso central.
Desde lesiones en la médula espinal hasta trastornos cerebrovasculares, este tipo de síntomas no deben ignorarse. En Grupo Scanner Vizcaya contamos con tecnología de vanguardia y un equipo médico altamente especializado para detectar, diagnosticar y tratar a tiempo las causas más graves detrás de este tipo de sensaciones.
¿Qué puede causar entumecimiento repentino?
Las causas del entumecimiento pueden variar ampliamente. Entre las más frecuentes cuando hablamos de afectaciones neurológicas o de columna se encuentran:
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Hernias discales: una compresión de los nervios espinales puede producir entumecimiento en brazos o piernas.
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Estenosis del canal medular: el estrechamiento del canal espinal puede provocar compresión nerviosa progresiva.
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Accidente cerebrovascular (ictus): uno de los síntomas más frecuentes del ictus es la pérdida de sensibilidad en una mitad del cuerpo.
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Neuropatías: ya sea por causas metabólicas, como la diabetes, o inflamatorias.
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Esclerosis múltiple y enfermedades desmielinizantes: estas pueden manifestarse con episodios de pérdida súbita de sensibilidad.
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Traumatismos: golpes fuertes en columna cervical o lumbar pueden derivar en alteraciones nerviosas.
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Compresión del nervio periférico: como el síndrome del túnel carpiano, que provoca entumecimiento en las manos.
¿Cuándo acudir al especialista?
Existen señales de alerta que indican la necesidad urgente de un estudio por imagen, especialmente cuando:
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El entumecimiento aparece de forma súbita e intensa.
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Se acompaña de debilidad muscular, pérdida de fuerza o dificultad para mover una parte del cuerpo.
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Se presenta en un solo lado del cuerpo.
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Va acompañado de dolor de cabeza fuerte, confusión o alteraciones del habla.
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Aparece tras un traumatismo o accidente.
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Persiste durante varios días sin mejoría.
Ante cualquiera de estas señales, es fundamental realizar un diagnóstico preciso con técnicas como la Resonancia Magnética (RM) o el TAC cerebral y medular para descartar problemas graves.
Tecnología al servicio del diagnóstico neurológico
En nuestros centros de diagnóstico por imagen, contamos con RM y TAC que permiten obtener imágenes detalladas tanto del encéfalo como de la médula espinal y los nervios periféricos. Esto nos permite:
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Detectar isquemias o hemorragias cerebrales de forma rápida.
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Evaluar compresiones medulares, hernias o lesiones inflamatorias.
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Localizar lesiones ocultas en raíces nerviosas.
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Confirmar la causa de síntomas neurológicos de forma no invasiva.
El diagnóstico temprano puede marcar la diferencia entre una recuperación completa o secuelas permanentes.
Casos en los que una RM o TAC ha sido decisiva
Muchos de nuestros pacientes llegan con síntomas inespecíficos como entumecimiento en una pierna o debilidad en una mano. Gracias al uso combinado de técnicas avanzadas de imagen, en múltiples ocasiones hemos podido detectar patologías graves en fases iniciales, permitiendo que el tratamiento se inicie de inmediato.
Uno de los casos más frecuentes es la identificación de pequeñas hernias discales en columna cervical o lumbar que presionaban nervios clave, provocando pérdida de sensibilidad o coordinación.
Escuchar al cuerpo, actuar con rapidez
No todos los síntomas neurológicos son graves, pero no todos son benignos. Escuchar las señales del cuerpo es clave. El entumecimiento repentino no debe ser ignorado, sobre todo si se presenta con otras alteraciones motoras o sensoriales.
En nuestros centros, ofrecemos una atención rápida y personalizada a pacientes con síntomas neurológicos, con tiempos de espera reducidos y diagnóstico de alta precisión. Tu salud no puede esperar.
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